viernes, 14 de septiembre de 2007

La tierra resume lo no dicho, expresa la imagen disforme del tiempo. ¿Qué es el tiempo en todo esto? El verso vacío, la poesía inacabada, tú sin serlo.

Debería...y sin embargo, no me atrevo.

Te hablo del cansancio frente a la ventana cerrada. Te hablo sin querer hacerlo, sin la incertidumbre de los amantes que los impulsa a volver.

Sólo soy un mortal como cualquier otro, sólo la melancolía redimida en los pasos del otro. La nulidad ensimismada del pensamiento, que vaga buscando lo que tiene al lado.

Refrendo en mis manos tu cuerpo, y sigo con la añoranza acogida en los besos

Por ahora sólo eso: la nada, el miedo, el suicidio en pleno fracaso.

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